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HACIA UNA NUEVA SOCIEDAD: PAUTAS PARA LA DEFINICION DE UNA TRANSFORMACION PERSONAL

HACIA UNA NUEVA SOCIEDAD: PAUTAS PARA LA DEFINICION DE UNA TRANSFORMACION PERSONAL

En la medida que nuestras vidas se vayan poniendo mas difíciles y complicadas y que los cambios en el mundo se aceleren progresivamente imponiendo constantemente nuevas limitaciones y exigencias que parecen interminables y casi inalcanzables, es natural que nos sintamos bastante tensos, frustrados y, sin duda, un poco perdidos.  Como resultado nos acostumbramos a culpar a todo lo que nos rodea por nuestros fracasos, inseguridades y falta de felicidad personal.  Siempre decimos que la situación económica es la culpa de nuestros problemas, o es un problema familiar, o son los vecinos, o es la incomprensión de nuestro jefe,  cualquier cosa menos nosotros mismos.

El problema con esta visión está en el hecho de que creemos que las causas de nuestras frustraciones siempre residen en el mundo externo a nosotros cuando precisamente lo contrario es la verdad.  Consecuentemente, es fácil echar la culpa a lo ajeno por nuestra situación sin entender que los únicos correctivos posibles existen dentro de cada uno de nosotros.  Como primer paso hacia el equilibrio personal es necesario reconocer que la clave de nuestra felicidad existe en comprender que aunque no podemos cambiar la realidad que nos rodea, sí somos capaces de transformar nuestra realidad interna y en el proceso modificar la perspectiva que poseemos del mundo.  

La transformación personal reconoce que uno tiene el poder de ver todas las cosas como uno desea.  Somos lo que creemos.  Si uno ve agresión, celo, miedo, fracaso, etc. en el mundo así será la vida que experimentaremos y con eso viviremos.  Sin embargo, lo contrario también es verdad.  En esta dinámica el pasado juega un rol importante ya que nuestro sistema de creencias está basado en las experiencias del pasado que es constantemente súper impuesto en el presente con la anticipación de que ocurra en el futuro.  Nuestras percepciones del presente son tan controladas por el pasado que es casi imposible ver las cosas sin distorsiones y sin limitaciones.  Con la voluntad, nosotros podemos re-examinar quienes creemos que somos y así lograr una comprensión nueva y mas profunda de nuestra identidad personal. 

El tomar la decisión de modificar nuestra realidad nos permitirá un sentido de libertad total.  A la vez, ser libres nos permite vivir sin ningún tipo de temor o limitación que nos impida ser lo que queremos ser y lo que somos.  Siempre percibimos que los demás nos están atacando o agrediendo cuando en realidad ellos están actuando desde un punto de vista defensivo basado en la ignorancia.  El atacar se deriva de un miedo,  una amenaza o de un sentido de culpabilidad por parte nuestra que tiene un solo resultado y ese es el conflicto, no solamente dentro de nosotros mismos sino también con los demás.

Para experimentar la paz en vez del conflicto es necesario modificar nuestras percepciones.  En vez de ver a los demás como atacándonos es necesario entender su situación de ignorancia o de miedo,  aunque ellos mismos no están concientes de esta condición.  La única forma de enfrentarlos es con el amor, demostrándoles que no es necesario temer, ni a nosotros, ni tampoco a la vida.  Pero cuando ellos no cambian de acuerdo a nuestras expectativas, los consideramos como los culpables de nuestra infelicidad así reforzando nuestras propias creencias incorrectas.  La paz personal no se obtiene mediante el empeño de cambiar a los demás sino de cambiar nuestras percepciones de ellos y de aceptarlos como son sin juzgarlos.

La paz interna solamente se consigue cuando uno puede perdonar a los demás.  El perdón se logra desprendiéndonos del pasado y por tanto es el mecanismo de poder modificar nuestras percepciones incorrectas.  Estas se pueden corregir ahora mismo a través del desprendimiento de lo que creemos que lo demás nos han hecho.  Este proceso nos permite liberarnos de las ataduras de nuestro pasado y de ser libres a actuar sin limitaciones en el presente.  Así rompemos el ciclo eterno de culpabilidad y de miedo que constantemente distorsiona nuestra realidad.   

La esencia del amor es de poder dar de él sin limitaciones.  Solamente a través de esto podremos experimentar el milagro ilimitable del amor y de la bondad.  Esto se logra mediante la comprensión de como el amor no tiene limites, se puede dar sin tener temor de que éste se nos acabe.

En si se podría afirmar lo siguiente:  

  1. Es necesario que definamos lo que cada uno de nosotros queremos que sea la realidad que experimentamos diariamente.
  2. El miedo distorsiona nuestra visión de la realidad y nos confunde constantemente.  Es como si tuviéramos unos lentes muy oscuros que no nos deja percibir las cosas como deben ser ni como son.  En la medida que vayamos eliminando el temor de nuestras vidas, experimentamos una transformación personal muy profunda.
  3. Podemos desprendernos del miedo si dejamos de juzgar a los demás y de proyectar el pasado hacia el futuro.  Es necesario vivir únicamente en el presente.
  4. A través del perdón, podemos aprender a no juzgar a los otros y de no ver a todos como culpables de nuestros problemas.
  5. La única realidad que existe es la tranquilidad y paz interna y el amor para todo lo que nos rodea.  En si, se pudiera ver al amor como el desprendimiento del temor.  El mundo no tiene que cambiar para que nosotros experimentemos la paz personal.
  6. Podemos aprender a guiarnos con esa voz interna que todos poseemos siendo esta nuestra intuición.  Además de que esa voz interna nos sirva de guía,  también nos da las pautas de como obtener lo que queremos en la vida.  Cuando uno sigue esa voz, a veces es necesario reconocer que los resultados no son inmediatos ni tangibles.  Esto es lo contrario a la lógica convencional cuando siempre se persigue lo que ya se conoce.   Las metas de la transformación personal son necesariamente desconocidas ya que si no fueran así,  fuéramos seres realizados.
  7. Debemos empezar a ver mas allá de nuestra realidad actual y entrar en un estado de claridad en que veamos que somos maestros de nuestro propio destino.  Tenemos que afirmar que SI, poseemos esa decisión en determinar lo que queremos percibir y en las emociones y pensamientos que queremos sentir.
  8. Mediante el control de la mente se puede aprender a usar la imaginación positiva y ésta nos permitirá desarrollar percepciones positivas de la vida, el milagro y el poder del amor.

En conclusión, yo soy responsable por todo lo que percibo.  Yo escojo los sentimientos y pensamientos que quiero y la meta que deseo lograr.  Todo lo que me pasa es porque así lo determino y yo recibo proporcionalmente a lo que yo invierto.