Denuncias

LA TRANSFORMACION DE NUESTRAS CONCIENCIAS

LA TRANSFORMACION DE NUESTRAS CONCIENCIAS

Con una vida que se pone constantemente mas complicada y difícil, es natural que uno empiece a hacerse una serie de preguntas sobre:  ¿Que es lo que estoy haciendo aquí, hacia donde es que voy y cual es el propósito de mi vida?  Seguramente, la respuesta no es fácil de encontrar y quizás no sea una sola.  Sin embargo, hay que insistir en la búsqueda de una definición si es que queremos orientar nuestras vidas hacia una meta clara y coherente.  El ser humano ha tratado de construir su propia visión de la existencia buscando caminos tan diversos como las diferentes ideologías políticas, económicas y sociales, sistemas filosóficos, dogmas religiosos,  cualesquiera que sean, tanto antiguas como modernas.   

Es cierto, cada una de estas visiones describen la verdad pero muy sesgadas y parcializadas.  Su percepción de la vida es de un solo aspecto, como si fueran los dedos de una mano, cada uno ve la palma desde su punto de vista.  Algunos de los dedos son gordos, otros flacos, unos largos con muchas coyunturas pero otros cortos y así sucesivamente.  Las condiciones diferentes de cada dedo colorea y altera su visión de la palma.  La única diferencia es que cada uno la está describiendo desde su punto de vista y condicionado por el espacio – tiempo.  Sin embargo, la palma está allí, existe y es la fuente y poder detrás de todos los dedos, representando así lo universal y común que existe entre ellos.   

Con esta visión, se podría afirmar que por mas diferentes que puedan aparentar los dedos existe un denominador común entre todos, un hilo que los une.  Para nosotros, entonces, el reto es poder descubrir algunas características de esta palma con la intención de traducirlas en acción en nuestras vidas cotidianas.  Un intento modesto en esta dirección seria la siguiente secuencia de ideas:

  1. Existen leyes universales que gobiernan toda creación.  Estas aplican igual, equitativa e imparcialmente a todos los niveles y formas de vida, desde lo mas ínfimo hasta lo mas vasto independientemente de su estado de evolución.
  2. Todo lo que se mueve tiene vida.  La única diferencia es su nivel relativo de conciencia o desarrollo.  Es una Ley Universal que no hay tal cosa como descanso o suspensión de movimiento en el Cosmos y que sin movimiento no habría ni vida ni evolución.  En esencia, el movimiento es vida y la vida es movimiento.   
  3. Es un principio universal que toda la existencia lucha hacia la perfección.  En si, todas las formas de vida (por mas grandes o pequeñas que sean) están en sus propios caminos de evolución continua y progresiva.
  4. Todo lo que existe en el universo es conciente y dotado de una conciencia de su propio tipo en su propio plano de percepción.  Todos los átomos en el universo posee la potencialidad de autoconciencia y son en sí y para sí mini-universos.  La diferencia entre un átomo (con su núcleo en el centro y sus electrones que giran a su alrededor) y un sistema solar es menos de lo que uno se cree.
  5. El ser humano es sencillamente un miembro de uno de los reinos que habita el planeta Tierra.  Somos miembros del reino humano, el mas evolucionado de los que somos actualmente capaces de percibir.   Tenemos contacto con los tres reinos inferiores: el mineral, vegetal y animal, aunque seguramente existen otros superiores a nosotros.
  6. Sin embargo, el reino humano no tiene mas ni menos importancia que los otros.  Simplemente somos todos seres vivientes evolucionando simultanea y paralelamente.
  7. El ser humano no es un ente aislado de su entorno, sino parte integral, física y espiritual de todo lo que le rodea.    
  8. Es una Ley Universal que no existe ningún privilegio especial otorgado al ser humano salvo ese que el mismo obtenga mediante su propio esfuerzo y persistencia en el camino de su evolución y metamorfosis personal.

En conclusión, no somos los únicos pasajeros en esta nave espacial que llamamos Planeta Tierra, quizás ni somos los mas importantes.  Todos los demás, que también habitan este globo, están en su propio camino de evolución y es nuestro deber respetar su derecho de auto-realizarse.  En si, nuestro desarrollo como seres vivientes está íntimamente ligado con el de las demás formas de vida que nos rodea;  porque el ser humano es una parte inseparable del total, cualquier acción que tomamos a favor o en contra de la biosfera nos afecta directamente.              

Es imprescindible entender que el primer paso en promover el desarrollo de nuestra sociedad es la formación en el ser humano de una conciencia y visión de la vida acordes a nuestra ubicación real en el Cosmos.  Es únicamente a partir de este hecho que los demás elementos caerán por su propio peso.  Es un principio universal que toda la existencia lucha para la perfección.  El ser humano no es una excepción, ya que su propósito en la vida culmina en su auto-realización.  Por tanto, la verdadera revolución necesariamente tiene que empezar en el interior del ser humano ya que solamente podemos proyectar al mundo exterior eso que hemos consolidado internamente.  Es solamente por medio de este camino que podremos lograr la paz con nosotros mismos.    

Para crear una mejor sociedad, los individuos que la componen también tendrán que transformarse.  Cualquier otro intento,  por mas bien intencionado que sea, que no contemple la metamorfosis del ser humano como objetivo fundamental, solamente podrá ofrecer beneficios marginales en el mejor de los casos y nunca llegaría al fondo del problema real de nuestra civilización.